Apelo al lápiz y al papel una vez más. Me aburro mucho. Una de las cosas que me hizo reir recién fue que en el plástico de mi chupetín dice "Pirulito Lollypop".
Hoy imaginé. Imaginé que nos dabamos un beso con gusto a chocolate. Imaginé que no tenía miedo. Imaginé que siempre estabas ahí, cuidándome. Imaginé gloriosos domingos lluviosos, lágrimas en tus ojos y en los míos. Sonrisas y más besos.
No quiero esperar. No espero. Me voy. miro atrás y no me seguis. Y recobro el miedo que en mi imaginación había perdido. Un torrente de sangre invade mi cerebro. Caí y no pude correr más. Otra vez la no sensación de mis brazos y mis piernas, la pata de un elefante en mi pecho, el sentimiento y mis pulmones vacios. Me ahogaba y moría. Y muero. Y espero, sentir por primera vez y en tangible realidad, el gusto a chocolate en mi boca, tus brazos sobre los míos y despues el abrazo que nos hace inseparables.
2 comentarios:
ya te dije no?
en este momento, llamativamente lo cursi, en un mundo de mierda como este, es profundamente revolucionario
mmmmm, epa es mio!!! me gusta desde el no chocolate...
o sea, toda la imagen de muerte, de no irrigación de sangre al cerebro, del pie del elefante en la cabeza, será un estado mío, no?
te quiero mucho, y basta de enanos de jardín!!!!!!
Tulyps.
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