viernes, junio 29, 2007

Cauterizando Heridas Con Cera de Dos Velas

Es estirarse a la mañana y no golpearte con nada más que tus propias ambiciones. Es la cosquilla del primer día en el colegio. Es el miedo a entrar al primer baile. Es ver que todo cambio, que ese cuerpito es un Cuerpo, e impone.
Son los pechos prematuros a los 11, es el primer beso a los 14, esa primera vez a los 16. Esa lapicera que no escribe, cuando después de mucho tiempo le pedís el mail.
Es esperarlo a ls 10 y que venga 10:10. Es esa magia cuando lo ves y todo está tan perfectamente claro. Ese dolor, ese pie de elefante en el pecho que no te deja ni morir ni vivir. Como un muerto en vida, como una vida sin gracia.
Es el elevar del pecho en busca de aire. Es como cuando escuchás ese tema que te hace latir más fuerte el corazón. La sensación de impotencia cuando el Amor de tu Vida está a 60 pasos físicos y no se atreve a recorrerlos.
Es pautar el encuentro imaginario y que nada salga según el plan. Es tratar de darle celos, cuando lo ves sonreir y apenas se da vuelta esconderle tu profundo llanto, el penoso dolor de no tenerlo a tu lado. Ser egoísta y ocultarle tus heridas. Es cauterizarlas con cera de dos velas y dar cuenta, que esas velas eran para eso que pauté y que nunca jamás sucederá.

lunes, junio 25, 2007

Alessia y Estanislao

No les interesaba lo teórico. Eran tipos de ponerle el pecho a la bala, de ir al frente sin importar lo que pasara. Él no tenía grandes aflicciones pero le gustaba coleccionar sachets de leche, de diferentes marcas y con códigos de barra re locos. Ella por su parte tenía por hobbie tomar alcohol etílico y vomitarlo antes de intoxicarse de más. Pocos entienden porque todavía están juntos, pero en cuestiones del amor no hay mucho que entender.
Cuando tienen sexo cantan canciones de Nubeluz, Xuxa y Gaby Fofo y Miliki. En cierto modo eran incomprendidos, no son personas con las que te topas todos los días pero su modo de vivir es tan diferente al nuestro que llaman la atención.
Si era cuestión de poner el cuerpo, ahí estaban ellos. Cuando habia que pintar paredes Alessia aspiraba pintura con la nariz y soplaba de manera que los manchones cubrían gran parte de la pared en una sola soplada.
Estanislao había nacido para hacer muebles. Clavaba con los dedos, tenía una fuerza desconocida y bastante impactante para un ser humano.
Y no sé, será cuestión que cada uno encuentre su complemento. Los dos se quieren y son felices. Y bueno, yo no soplo pintura por la naríz, pero sangre en las venas me sobra. ¿Me juntaré con un doctor especialista en laboratorio? No lo sé... No muchos pueden lidiar con tanta sangre, y otros la tienen tan tibia que parece inexistente.
Por cierto, se casaron bajo el rito umbanda. Ahora le cantan a la Pompashira o algo así. Yo seguiré buscando a mi medio pomelo. Chau.

viernes, junio 15, 2007

Llorando (Mulholland Drive)


Yo estaba bien por un tiempo,
volviendo a sonreír.
Luego anoche te vi
tu mano me tocó
y el saludo de tu voz.

Y hablé muy bien de tu
sin saber que he estado
llorando por tu amor
llorando por tu amor.

Luego de tu adiós
sentí todo mi dolor.
Sola y llorando,
llorando, llorando, llorando
no es fácil de entender
que al verte otra vez
Yo seguiré llorando

Yo que pensé
que te olvidé
pero es verdad
es la verdad.

Que te quiero aún más,
mucho más que ayer.
Dime tú qué puedo hacer.

No me quieres ya
y siempre estaré
llorando por tu amor,
llorando por tu amor.

Tu amor se llevó
todo mi corazon
y quedo llorando
llorando llorando
llorando llorando
llorando por tu amor.

Rebekah del Rio, La Llorona de Los Ángeles
David Lynch

jueves, junio 07, 2007

Extrañamiento


Ya de por sí, subir a los colectivos es un esfuerzo sobrehumano. Es ese cartelito, esas cinco palabras que torturan mi psíquis.

Por lo general, trato de ignorarlo. Cierro los ojos con fuerza, cosa que cuando los abra ya vea el valor de mi "destino".

Pero esta vez no pude. No bastó con cerrar los ojos. Esa molesta pantallita decía: "Indique su Destino al Chofer". Le dije al colectivero si encontraba en mi rostro algún interés, algo que le llamara la atención, incluso le pregunte si le gustaba. No podía contarle a cualquier cristiano cuál pensaba yo que era mi Destino.

Me miraba raro. Le pregunté si tenía algún título de psicólogo, si esto lo hacía por placer, si se lo planteaba a todos los pasajeros. Le pregunté si era una broma, ya caí varias veces en la de la leyenda en la puerta trasera que dice: "Mire Atrás Al Bajar" y cuando miro atrás mío, sólo veo un impaciente pasajero que quiere bajar y me hace saber que estoy obstruyendo su camino. Nunca voy a entender ese chiste.
Más desconcertado aún, se rascaba la cabeza como si yo le hablara de Física Cuántica.

Enojada, con ira inyectada en mis ojos le pregunté si estaba dispuesto a bajar mi autoestima, si alguien le había contado lo frustrada que me sentía. Los pasajeros se empezaban a impacientar, hasta una señora mayor lloraba al verme tan indignada por el asunto.

Sentí que me investigaba, que todo el gremio de colectiveros con Pantallitas con leyenda me investigaban, por eso todos me preguntaban sobre mi Destino. ¡Eureka! ¡Era eso!
Los choferes me querían ayudar a salir de mi frustración. Por eso la pantallita molesta.
Abracé a aquel chofer, y por hoy prescindí del colectivo, caminar no evoca preguntas.

viernes, junio 01, 2007

Estadío

Me temblaban las manos. No podía ni sostenerme a mi misma, aunque para él todo estaba bien. Evito su rostro, el mismo me hace la lengua trabar. Miedo a lo desconocido, eso me dice mi psicóloga. Yo pienso que a veces es demasiada adrenalina para un cuerpo tan joven. Siento que hay excesos. Mi rótulo debe ser "Persona con Demasiada Sangre en las Venas". Soy ansiosa, no es novedad. Más si estoy en una situación que me pone nerviosa. Me altero con facilidad y no paro de moverme, ya sean manos, pies, ojos, nada esta quieto.
A veces tengo la sensación que me voy a morir. Presión x presión x presión + abismo + desesperación= Ataque Psicótico.
Mis días se manejan en inventarios. Hoy tengo:
  • Desesperación: 5 unidades.
  • Dolor: 2 unidades en descenso.
  • Alegría: 6 unidades en aumento. Más aún con las noticias de no-work.
  • Cansancio: 4 unidades.
  • Ganas:10 unidades.

Nada es regular. La hora a esta altura del día es un problema. Pasa muy rápido, muy lento. Momentos donde me río, lloro y me dan ganas de matar. La ciclotímia. Tengo asco.

Ayer no soñe nada, y me hubiese gustado soñar algo apasionante, pero no. Mi vida nocturna es aburrida. Muchas películas. Hoy no. Ya me arde el estómago. Hoy fiesta gay, si no me arrepiento.

Basta, no te soporto. No me soporto. Me fui. Pero te espero. Estás en mi mano izquierda; yo en la tuya, y todo es tan ambiguo...