viernes, abril 29, 2011

Cuestiones Madurativas

La anécdota es la siguiente. Corría el '98, mundial de Francia. Todos teníamos la mochila con ese loro de mierda que emulaba ser la mascota.
Me gustan los mundiales, me re apasionan y sacan el lado masculino puteador a flor de piel. De todas francas maneras, este mundial sentí que lo íbamos a ganar.
Yo seguía teniendo el Family. Es como si ahora, en la era wii uses un sega. Pero en fin, yo y mis cartuchos enormes de family eramos felices y me pasaba mucho tiempo jugando al Super Mario.
Tenía 10 años. 10 man. Y Mamá en un tono que en mi vida me voy a olvidar, me dijo:
- Me parece que tenemos que ir comprando un "corpiñito" eh..
Pero me cago en la puta madre, entendés los diminutivos? Que situación incomoda por el amor de Cristo.
Automáticamente me miré y me odie. Estaba todo tan bien, yo y mi cuerpo de tabla de planchar. Y de repente esta incipiente teta me estaba cagando la infancia.
No tuve mejor idea que tratar de retrasar el hecho inevitable. No me percaté jamás de mirar el árbol genealógico y asimilar que mi destino era el de hoy. Tener una tetas balcón.
Me fajé. No me autoflajelé, agarré las vendas que usaba mi Mamá para las piernas y me vendé con la fuerza de una creatura de 10 años, intentando no crecer.
Seguí haciendo esto hasta que mi creadora me llevó a una lencería de Villa Crespo y con un gran nudo en el estómago me sometí a la prueba.
La cagada es que una vez que el "corpiñito" entra en tu vida, adoptás la comodidad y dejé de ser la nena que jugaba al Family con los chicos, ahora era la nena con tetas.
Ok, después vino el episodio femenino. Esa es otra anécdota.
Pero hoy me acordé de este episodio. Y, no sólo que estos atributos me han alimentado a lo largo de los años. La cuestión pasa por algo que fue tan traumático, a la larga me trajo muchas conquistas.
El punto es que a veces desee no tenerlas. Otras pense que sin ellas todavía sería virgen.
Hoy gracias a mi nuevo mejor amigo, El Hombre P, hago uso y abuso.

2 comentarios:

Carlos Lucero dijo...

cuánta añoranza...
la infancia esta siempre al acecho, es más presente que lo que queremos creer en nuestra adultez absurda de conclusiones copiadas de manuales..
malditos corpiños...
y bonitos

ミ★ lαdч αmєвα ★彡 dijo...

Recien lo leo ... a mi me paso algo parecido, pero en mi caso, las tetas tienen el mismo tamaño de cuando yo tenia 10 años :( - I bue ...